El ferrocaril minero de Villafría a Monterrubio de la Demanda (Historia y Naturaleza)

El 12 de julio de 1896 se inician las obras del ferrocarril minero que unía Villafría con Monterrubio de la Demanda. Las previsiones sobreestimaron las reservas de mineral de hierro y carbón, que se creían capaces de abastecer la poderosa industria vizcaina, e incluso dedicar importantes cantidades a la exportación. La obra estaba presupuestada en 12 millones de pesetas para un total de 65 kilómetros. La vía tenían una anchura de un metro, utilizándose para su construcción carriles de acero ingles y traviesas de madera procedentes de los árboles de la Sierra de la Demanda. El número de trabajadores rondaba los 1500 (llegando en algún momento a los 2000), los cuales cobraban una peseta diaria por trabajar todo el día. Las condiciones de trabajo eran muy duras e incluso se llegó a producir una huelga el 2 de abril de 1900 pidiendo una jornada de 12 horas. Como cantera se utilizó la Sierra de Atapuerca. Se excavó una trinchera por la que discurría el ferrocarril, dejando al descubierto los que hoy son los yacimientos paleontológicos más importantes de Europa. El viaje inaugural se produjo el 19 de octubre de 2002. Pero como las distintas explotaciones mineras no son tan rentables como se esperaba pronto dejan de circular trenes, de modo que hoy nos consta de que en 1904 ya no circulaba ninguno. En 1913 el Ministerio de Fomento prohibe circular trenes debido al mal estado de las vías. En 1920 se inicia una reparación que se paralizaría al año siguiente. Las vías se venden en 1941 y se levantan en 1947. En 1998 se inicia su conversión en vía verde, trabajo que concluiría en 2003.